Ángeles de Luz: patinaje sin barreras
En el colegio Rodrigo Lara Bonilla de Ciudad Bolívar, el profe Martín y sus 17 estudiantes invidentes demuestran a bordo de sus patines que la discapacidad no incapacita. Todo es una cuestión de perspectiva.
el profe Martín, el responsable de lograr que niños videntes e invidentes se encuentren en un mismo espacio para aprender unos de otros en una perfecta simbiosis que hoy por hoy transforma realidades en Ciudad Bolívar. “La gran motivación es ver a los niños rodar. Ver cómo un niño invidente, que no ha tenido la oportunidad de practicar algún deporte o de hacer algo distinto, se mueve con soltura por la pista, es algo que no se puede describir. Llega en ceros y luego no sólo patina sin miedo, sino que también se convierte en una persona más independiente y más segura de sí misma.
Cuentan con estudiantes de otros colegios y con toda la dotación necesaria para que puedan practicar este deporte.
La esencia de Ángeles de Luz
De 17 niñas y niños invidentes tres veces por semana, ruedan al sur de Bogotá para romper esquemas, aumentar la velocidad a sus sueños y demostrarle al mundo que la discapacidad no incapacita, simplemente hace diferente la forma de percibir el mundo.
El patinaje se ha convertido en el nuevo pasatiempo de la familia que agradece que personas como el profesor Martín sean capaces de ver primero a la persona y no a la discapacidad. Patinaje sin barreras.